LIUBLIANA CAPITAL DE SLOVENIA (IV)



Si uno acude a la ciudad fuera de los meses de verano se encontrará lo que yo me encontré, mucha nieve, pero no importa esta coqueta capital europea de escaso 200.00 habitantes es el perfecto colofón a este Escapada que venimos realizando de la mano de ECOWILDLIFE. Como la mayoría de las ciudades del imperio austro-húngaro es una capital recogida, llenas de nobles y hermosos edificios, con amplias avenidas y con monumentos que la jalonan, el pasado comunista, o de Tito como le gusta llamara a los eslovenos, también dejo su recuerdo en la impronta de avenidas enormes con edificios del “régimen”, instalados a las afueras de lo que es la maravilla de esta ciudad, su centro histórico a los pies del castillo.

Cruzamos de es Liubliana de servicios y residencial por algunos de sus puentes, alguno de ellos regalos que el arquitecto Jože Pleĉnik hizo a su ciudad y del cual hablaremos en el siguiente post. Hoy lo hacemos por el puente del Dragón o de los Carniceros, el primer puente de hormigón que se hizo en la ciudad y uno de los primeros de Europa. Este puente simboliza el artnoveau de la ciudad. El Dragón se convirtió en el símbolo de la nueva ciudad y sobre él circula una bonita leyenda que relaciona al héroe Jasón con el origen de la ciudad. Según esta leyenda Jasón, junto a los argonautas, mató a un feroz dragón y salvó a una virgen que tenía secuestrada. Dicen los habitantes de la bella ciudad que incluso hoy, cuando una virgen cruza el puente, los dragones menean la cola.

Prácticamente todos los edificios y atracciones más hermosas de la ciudad se encuentran en esta margen izquierda del rilo Lublianija, que domina el castillo de la ciudad que merece una visita. Todo es un paseo peatonal de calles adoquinadas que nos llevan hasta la Catedral de San Nicolás, entre tenderetes de artesanía, flores y boutiques de lo más moderno. También viejas tabernas en las que en este invierno se bebe vino caliente.

Al otro lado del emblemático Puente Triple se encuentra la plaza principal de la ciudad, Prešernov Trg, y toda esta nueva zona ya se aleja de los estilos barroco y medieval del casco antiguo. Merece la pena pasear todos esas calles hasta la vieja universidad, la galería nacional , el parque Tivoli y como no fotografiarse al lado de la única huella que queda en la ciudad del pasado romano, está delante del parlamento y es una pequeña estatua de cuando esta ciudad se llamaba Emona.

En el siguiente post la arquitectura del gran maestro.

Comentarios

Entradas populares